La startup china de inteligencia artificial DeepSeek ha pospuesto la presentación de su modelo R2 tras enfrentar dificultades técnicas al intentar entrenarlo con procesadores Ascend de Huawei, un movimiento impulsado por autoridades chinas para reducir la dependencia de la tecnología estadounidense.
Según fuentes cercanas, la compañía tuvo problemas de estabilidad y conectividad durante el entrenamiento, lo que la obligó a recurrir nuevamente a chips de Nvidia para esta fase crítica, mientras que los procesadores de Huawei se utilizarán únicamente para la inferencia.
El retraso, originalmente previsto para mayo, ha permitido a competidores ganar terreno en el mercado. Expertos señalan que el caso refleja las limitaciones actuales de los semiconductores chinos para tareas de alto rendimiento, pese a los esfuerzos de Pekín por alcanzar la autosuficiencia tecnológica.
Además de las dificultades con el hardware, la prolongada etapa de etiquetado de datos también contribuyó al aplazamiento. Aunque medios locales apuntan que el lanzamiento podría concretarse en las próximas semanas, el fundador de DeepSeek, Liang Wenfeng, habría instado internamente a dedicar más tiempo para asegurar que el nuevo modelo mantenga la ventaja competitiva de la empresa.
A medida que la carrera global por el liderazgo en IA se intensifica, la experiencia de DeepSeek subraya el papel clave de los desarrolladores y la importancia de contar con infraestructuras tecnológicas capaces de sostener avances disruptivos.
Fuente: FinancialTimes